A pesar de que en la actualidad los smartphones ofrecen una calidad de imagen i sonido aceptables para su emisión en medios tradicionales o digitales. Tenemos que tener en cuenta que por el momento, no se puede competir con los equipos profesionales, ya que los dispositivos móviles tienen ciertas limitaciones.
1. Las ópticas de la cámara
Cada vez que vemos a un fotógrafo profesional o un operador de cámara con esos equipos tan grandes y aparatosos es por un motivo, en especial cuando se trata de las lentes.
Tanto en fotografía como en video, el objetivo que se utiliza posibilita un mejor acceso a la luz, mejor nitidez, la posibilidad de jugar con el enfoque y el desenfoque para dar una mejor estética.
No obstante, la mayor diferencia que se encuentra es en el uso del zoom. La mayoría de los teléfonos móviles tienen un zoom óptico muy limitado o directamente nulo. ¿Esto qué significa? Cada vez que intentemos hacer zoom, el móvil lo hace de forma digital, y por lo tanto, se pierda un cantidad considerable de calidad.
En el caso de los equipos profesionales, disponen de lentes intercambiables para usar tanto un gran angular como un teleobjetivo y conseguir imágenes sin pérdida de calidad.
2. El sensor
El sensor de las cámaras es, el equivalente digital, al carrete que se usaba antiguamente. Al igual que en el caso anterior, el tamaño también importa. Es cierto que la calidad de los sensores que usan las principales marcas de teléfonos inteligentes está mejorando a pasos agigantados y es por ese motivo que ahora es el mejor momento pero desarrollar el periodismo móvil.
Pero no nos equivoquemos, al igual que mejoran los sensores para los móviles, también lo hacen para los equipos profesionales, los cuales siempre irán unas cuantos pasos por delante en cuanto a la máxima calidad del momento.
3. Las baterías
Las cámaras de video y de fotos están pensadas para cubrir su función básica: grabar videos y hacer fotos. Es por este motivo que la duración de las baterías, dependiendo de su uso, puede durar hasta varios días y en ocasiones, se puede dar el caso que no usemos estos dispositivos durante varios días.
A diferencia de los teléfonos móviles que, están encendidos a todas horas, durante todos los días. Es más, los teléfonos están pensados para hacer y recibir llamadas y mensajes. Por otra parte también están diseñados para utilizar infinidad de aplicaciones entre las cuales se encuentra hacer fotografías y videos.
Por este motivo, la batería de un smartphone tiene una duración media de un día aproximadamente, siempre dependiendo del uso. Además, hay que tener en cuenta que con el tiempo, las baterías pierden su capacidad y su autonomía va a menos.
Por último, los equipos profesionales cuentan con baterías externas las cuales se pueden cambiar. Es habitual llevar encima más de una batería de repuesto para usarla en caso de necesidad. En el caso de los móviles ocurre todo lo contrario, tan sólo se depende de la batería interior que en ocasiones es intercambiable.
4. El sonido
Para el caso de las cámaras profesionales de video, cuentan con unos dispositivos para registrar el sonido muy superior al que los teléfonos llevan de serie. Además, las cámaras ofrecen la posibilidad de regular la entrada de audio de forma manual para mejorar su registro.
Además, en cuanto a audio profesional, existen infinidad de micrófonos y dispositivos que aumentan significativamente la calidad auditiva de los proyectos.
5.Después de todo esto ¿El Periodismo Móvil vale la pena?
La respuesta es SÍ, no obstante, es necesario conocer las limitaciones para aprender a usar el teléfono móvil como una herramienta más para el ejercicio de periodismo. Con el uso de accesorios estos dispositivos pueden ampliar su calidad y funcionalidad para ofrecer productos audiovisuales óptimos para su emisión en medios tradicionales y digitales.
En los próximas publicaciones explicaré como usar esta herramienta y que tipo de accesorios son la mejor opción para sacar el mayor provecho a nuestros teléfonos móviles.